Son principios de los años sesenta y la apertura internacional de España hace que esta se modernice con una de las únicas tecnologías existentes en la época, el TELÉFONO, que tras una campaña estatal empieza a llegar a todos los emplazamientos de la geografía nacional, y con ello, a nuestro pueblo.
En los años sesenta y después de un importante proyecto de infraestructuras en la provincia de Guadalajara, el teléfono llega a la comarca de Molina de Aragón, pues hasta entonces sólo cinco de las principales localidades de la zona disfrutaban de él. En Julio de 1960 se inaugura la nueva red, que dará servicio a 64 localidades, la práctica totalidad del territorio molinés, y quedando únicamente diecisiete municipios pendientes de su instalación, entre los que se encuentra Codes.
Tenemos que esperar hasta Octubre de 1962, más de dos años después, para que definitivamente llegue a nuestro pueblo y municipios vecinos.
Prensa de la época que anuncia la llegada del servicio telefónico a la Comarca de Molina (1960) y a Codes en octubre de 1962.
Como ocurre en todos los pueblos de pequeño tamaño, y ante la escasa infraestructura de estos, la instalación del servicio telefónico y con ello de la centralita y su terminal se realiza generalmente en viviendas privadas que albergan negocios.
En Codes, el receptor del primer "teléfono público" es Martín Vela, que por entonces regenta la taberna local en su domicilio, y a donde los codeños se dirigirán para recibir y realizar sus "conferencias" telefónicas.
A finales de los años sesenta el servicio telefónico pasa a ser prestado en la "Casa del Pueblo", entonces en desuso, pues ya no hospeda a los profesores de la cerrada Escuela Pública. En ella es gestionado por el entonces alcalde del pueblo, Pablo Vela.
Para ello se habilita en ella una zona que acoge la centralita y un pequeño locutorio para sus usuarios.
Tras la peculiar ventana de madera y cristal se escondía un pequeña y sencilla centralita que recibía los tonos de la llamada, y que se descolgaba si estos eran los correspondientes a la localidad. Esta ventana sigue el mismo patrón y forma de todas las que se instalaron a principios de los años setenta, en los que pasaron de ser manuales a semiautomáticas.
Ante la imposibilidad de que el receptor de las conferencias estuviera presente y el alto coste que supondría para el emisor de la llamada el mantener "descolgado" mientras se localizaba al destinatario, se acordaba una nueva conferencia a una determinada hora posterior para que este ya estuviera presente en el locutorio.
Cuando se realizaba una conferencia, el pago se fijaba, en función y conforme a lo establecido por la Compañía Telefónica Nacional de España (CTNE), con los minutos que señalizaba un marcador.
Centralita de la época, de mayor complejidad y tamaño a la existente en Codes, pero con idéntica ventanilla a la de nuestro pueblo.
Años setenta en Dúrcal (Granada).
Aunque los primeros teléfonos y centralitas rápidamente pasaron a formar parte de la vida cotidiana de aquellas nuevas generaciones de esa época, en los pueblos como el nuestro no llegó a tener semejante impacto. Su uso por las familias se restringía a casos de urgencia o necesidad, o para comunicarse con sus allegados en determinadas fechas especiales, siendo todavía muy arraigada la comunicación postal.
El servicio telefónico y el uso del locutorio público permanece en la Casa del Pueblo hasta 1973/1974, pasando posteriormente y con los años a los domicilios de los nuevos Alcaldes pedáneos de la localidad...
REFERENCIAS / AGRADECIMIENTOS / BIBLIOGRAFÍA:
- NUEVA ALCARRIA, Año XXI, Número 1125 - (1960, 16 julio).
- FLORES Y ABEJAS, Número 2402 - (1962, 9 Octubre).
- Historia de los teléfonos y otros medios de comunicación en el Valle de Lecrín http://www.adurcal.com/enlaces/mancomunidad/guia/telefonos/
- Agradecimientos a José María del Moral Martínez.